Jornadas de rol: qué encontrarte
19/06/2019, Bastión Rolero
Se acerca el verano y con él la temporada de jornadas de juegos de rol. En este artículo os explicaremos algunas consideraciones a tener en cuenta a la hora de participar en jornadas.
¿Qué son?
Una jornada o en plural jornadas son un evento que ofrece partidas de juegos de rol y normalmente, también juegos de mesa. En esta clase de eventos vamos a jugar con desconocidos y a juegos nuevos y diferentes. ¿Por qué participar en algo así? Las jornadas nos van a permitir jugar a rol y eso para mí es un gran aliciente, pero es que además nos va a permitir conocer a gente de nuestro entorno con los mismos intereses que nosotros. Nos va a permitir conocer las últimas novedades publicadas así como la oportunidad de llevarnos a casa algún manual gracias a los sorteos que se suelen organizar.
Recuerdo mi primera jornada. Como había hablado con los organizadores antes de ir, uno de ellos se ofreció a recogerme en la estación de tren y a acercarme al recinto donde se desarrollaba la actividad. Tenía 21-22 años y participé en una partida a Aventuras en la marca del este y pude dirigir a un juego que estaba desarrollando. Fueron todos muy atentos y comimos también juntos. Guardo todavía relación con los miembros de la asociación organizadora y sé que puedo contar con ellos para una buena partida o para planes alternativos.
Os animo a entender este formato de convención como algo social, una excusa para salir de casa y disfrutar a algo nuevo. Una excusa para entablar conversación con gente con la que no tenemos ocasión de conocer de otra manera. Es una forma de expandir miras en el hobby y una forma más de pasarlo bien. Para gente como yo supuso el conseguir nuevas amistades duraderas.
¡Cuidado, son personas!
En las jornadas de rol hay un montón de personas. Evidentemente esto tiene sus problemas. El primero, es que no sabes con quien te vas a encontrar y quizás quien se haya sentado a tu mesa sea una persona indeseable y molesta, quizás un baboso, es por ello que debemos saber cómo enfrentarnos a esta clase de inconvenientes. Así que te animo a que avises a la mesa de juego (a tus compañeros y gente más cercana) por si alguien te puede echar un cable, a la organización también, y si los problemas te suponen una situación abrumadora y agobiante, abandonar las jornadas. Es un pequeño sacrificio que tenemos que hacer para evitar que vaya a peor.
Visto ese punto, también os encontraréis con gente increíble y que os va a hacer pasar una grata velada. Gente de vuestro rango de edad y que tiene al menos un punto en común (el rol) y es que normalmente los roleros van con el pack básico de frikidad así que encontraréis en jornadas gente a la que le gustan también los cómics, el anime, series o ciencia ficción. Así que vamos a por un 2x1. Os dejo como consejo el pedirles que te agreguen al facebook y seguiros mutuamente por twitter: ellos podrían ser tus próximos jugadores o directores de juego, además de poder indicarte clubes o asociaciones de rol que no conocías. Especialmente útil si te acabas de mudar de ciudad como yo o si no conoces opciones de ocio a tu alrededor.
Esto es en la parte social de las jornadas. Vayamos a explicaros el formato y cómo funcionan.
Funcionamiento: ¡hola, quiero jugar una partida!
Cuando vas a unas jornadas no vas a ciegas o sin saber qué encontrarte: la organización anuncia qué partidas se ofertan y qué otras actividades podemos disfrutar en sus redes sociales y eventos de facebook. Darán los horarios de apertura de la actividad y horarios de las partidas. A veces abren muy pronto y no vas a querer madrugar, pero procura estar con antelación para que te dé tiempo a apuntarte a las partidas, conocer a aficionados que participarán en ellas y a saber en qué sitio del recinto vas a pasar las próximas 2-4 horas.
Esto resulta obvio, pero por respeto, avisa si vas a llegar tarde a la partida a la que te has anotado o si no vas a jugar finalmente. Hazlo con antelación para que la organización pueda reaccionar a tiempo. Piensa que en una jornada la gente y colaboradores están currando gratis por ofrecerte un día increíble. Muchos de ellos desearían poder participar y jugar pero no pueden; están haciendo un gran sacrificio por tu diversión.
Como consejo, intenta apuntarte a juegos nuevos. No sabrás a qué vas a jugar muchas veces pero para jugar a lo que juegas en casa, quizás no aproveches todo el potencial que te ofrece esta clase de eventos. Conocerás nuevos juegos y quizás haya alguno con el que sorprender a tus amigos y compañeros de mesa habituales. Procura anotar los títulos de los juegos por si quieres buscarlos después en internet.
Como segundo consejo, evita participar en la misma mesa que tus acompañantes y amigos. Si vas a jugar con tus colegas con quienes juegas habitualmente, habrás desaprovechado totalmente las jornadas y te habrás desplazado en vano a hacer algo que podías hacer en la comodidad de tu casa. Entiendo que de primeras suponga un desafío jugar con desconocidos, pero siempre aporta experiencias enriquecedoras: nadie juega igual y ningún director hace dos partidas iguales. Podrás copiar trucos, enigmas, dungeons… detalles que te hayan gustado y llevarlos a tus partidas. Aprende todo lo que puedas de cada sesión de juego.
Durante la partida, facilita todo lo que puedas su desarrollo. Especialmente si ves que el director de juego está pasando un mal rato. Ayúdale y pon de tu parte, por ejemplo, evitando crearte un personaje excesivamente complejo o que requiere reglas especiales. El tiempo de la partida es finito, quizás el recinto cierre en tres o cuatro horas, así que procura no alargar la creación de personaje porque no tengas la ventaja o talento perfecto. Hay gente que viaja y se desplaza para jugar, o que ha pedido el día libre en el curro, no acapares la partida con detalles nimios sólo porque quieres potenciar tu personaje al máximo.
Esto a nivel de creación de personajes, situaciones que también he tenido que sufrir en unas jornadas, pero hay más cosas a tener en cuenta. Es evidente que muchas partidas se hayan preparado para adaptarse a las circunstancias: limitación de tiempo, personajes creados con rapidez, jugadores que no conocen el juego o no saben jugar. Es por ello que debes intentar disfrutar al máximo aunque seas consciente incluso de cómo va a terminar la aventura porque sea demasiado previsible: no le desmontes el plan al director de juego, sé como el cómplice de alguien que está haciendo una broma. Deja que los demás desconozcan lo que has podido descubrir tú y prepara unas palomitas para ver como caen mortalmente en la trampa preparada.
Siempre al finalizar la partida dale las gracias a tus compañeros y expresa qué te ha gustado. Como directora de juego, me tranquiliza saber qué todo ha ido bien y que los jugadores están satisfechos. Pero también me gusta saber qué ha ido mal: sé discreto y educado expresándolo, y aunque hay directores que se lo pueden tomar a mal, a muchos les encantará saber qué mejorar o te podrán explicar el qué ha pasado. En una ocasión jugué con un director de juego que nos confesó que lo llamaron a última hora porque había pocas partidas ofertadas y no había podido preparar todo lo que tenía pensado.
Funcionamiento: ¡hola, quiero dirigir una partida!
Esto es desde el prisma de un jugador, pero puedes estrenarte en unas jornadas dirigiendo. ¡Qué miedo y emoción hacerlo! En cuanto sepas qué partida quieres dirigir díselo a la organización: procuran anunciar con semanas de antelación las actividades que van a llevarse a cabo, así que tienes que poder enviarles la información con bastante tiempo. Normalmente te van a pedir nombre de la partida/aventura, juego o sistema, cuántos jugadores aceptas en la partida y una breve sinopsis de la misma.
Hemos publicado en Bastión varios artículos sobre cómo preparar partidas para jornadas, así que te remito a varios artículos que tratan justamente de este tema y que van a resolver tus principales dudas al respecto.
Antes de la partida preséntate a tus jugadores, haz una presentación del juego y advertencias varias de lo que podrán encontrarse en la partida, especialmente si hay contenido sensible (sexo o gore principalmente). Debes comprender que esa gente no te conoce y que no tiene porqué estar habituado a ese contenido y a otro que pueda ser conflictivo (por ejemplo, si te gusta el humor negro), evita problemas de manera madura e intenta ser empático. Pon todo lo que puedas de tu parte y haz que los jugadores confíen en ti para transmitirte problemas (dudas de la trama, sobre las reglas…). Si la partida se tuerce por el mal comportamiento de un jugador, van a esperar que seas tú quien lo resuelva, así que no temas en echar a alguien de tu mesa o a recurrir a la organización.
Al terminar la partida pregúntales a tus jugadores si les ha gustado, qué cambiarían y otras cuestiones. Podrían hacerte ver agujeros de guión o qué reglas han ralentizado y acaparado la partida. Disimula si te resulta demasiado ofensivo lo que te dicen, especialmente si lo hacen con buena intención, pero tampoco te dejes insultar.
Si este artículo ha despertado tu interés en conocer estos eventos, te recomendamos que bucees en la red, preguntes en tu ayuntamiento y a asociaciones culturales qué eventos de esta clase se organizan por tu zona. Seguro que con preguntar en tu página o grupo de rol favorito en facebook podrán ayudarte.
Para muchos las jornadas de rol es un evento en el que participan asiduamente y no se suele explicar en ningún blog o web qué son o cómo se desarrollan, así que espero que este artículo te sea de ayuda si va a ser tu primera vez o si no conocías estas convenciones. A mí me gusta participar en ellas y colaborar con la organización con mis partidas. Me han dado muchas horas de diversión, muchísimos contactos y amigos y me han permitido mejorar como jugadora y como directora. Os animo muchísimo a que probéis esta experiencia y os animo muchísimo a que también nos la contéis.